Dos décadas de clamor popular por un tanatorio para Lena, bloqueado por informes negativos del área de Urbanismo

Una de las reivindicaciones reiteradas con más insistencia por los lenenses es la que demanda la construcción de un tanatorio para La Pola. Todas las familias, la mayoría, que han pasado por el doloroso trago de tener que despedir a un ser querido en estos últimos años se han visto obligadas a velar sus restos mortales en Murias (Mieres), Moreda (Aller) o incluso fuera de la Comarca, si estos estaban completos. Por ello, la petición se ha convertido en un clamor popular. Sin embargo, desde el Ayuntamiento no sólo se descarta una sala pública de duelos, sino que se han frenado los sucesivos proyectos presentados por empresarios privados para habilitar y explotar esa clase de complejos funerarios.

El primero fue tramitado hace ahora justo dos décadas: a finales de 2004 la sociedad allerana “Funerarias y Velatorios de Pola de Lena S. L.” solicitaba una licencia urbanística para levantar un tanatorio, dotado con un crematorio, en un solar (a la izquierda de la fotografía) de El Masgaín, petición que sería rechazada por la Junta Local de Gobierno. El asunto terminó ante los tribunales de justicia, que dieron la razón al Consistorio en su negativa a autorizar un horno incinerador de cadáveres en ese lugar.

Con posterioridad se barajó la posibilidad de abrir al público en general el velatorio de la Residencia de Ancianos “Canuto Hevia”, pero la idea tampoco tuvo mayor recorrido, bajo el argumento de que no era procedente “acercar la muerte" a un edificio en el que residen personas de avanzada edad.

En 2019 era un promotor lenense el que adquiría un bajo comercial en la calle Hermanos Granda para abrir un equipamiento de esas características, que tampoco ha logrado salir adelante tras una larga tramitación burocrática en la que Ayuntamiento y Principado pondrían diversos obstáculos, que llevarían al promotor a aparcar su iniciativa. Así, Lena encara 2025 como uno de los contados concejos asturianos en un rango de censo similar de población que aún no dispone de un servicio que el vecindario considera fundamental.